15/2/23

ECOEMBES MIENTE, otro caso más de greenwashing

Informe Greenpeace evidenciando el fracaso de su gestión.

La investigación pone de manifiesto cómo, empresas adjudicadas por Ecoembes, están guardando, enterrando y exportando plásticos de manera irregular.

Ante la situación insostenible del plástico, Greenpeace demanda al Gobierno más ambición en la tramitación de la nueva ley de residuos y no ceder al lobby de Ecoembes.

Greenpeace España elaboró el informe “Ecoembes miente: Desmontando los engaños de la gestión de residuos de envases domésticos” para evidenciar las deficiencias de un sistema de gestión que, desde su implantación hace dos décadas, no ha conseguido poner fin a la avalancha plástica. 



Cuando una empresa pone en el mercado un envase doméstico (plástico, aluminio, metal, papel-cartón…), lo hace imprimiendo un punto verde, que significa que se ha pagado un porcentaje para que Ecoembes recupere y recicle ese envase. Sin embargo, de todos los envases de plástico que la ciudadanía compra, Ecoembes apenas recupera y recicla en su contenedor amarillo el 25%, pasando el resto a contaminar el medioambiente.

Ecoembes es un monopolio formado por las principales marcas contaminantes de plástico (Coca-Cola, Nestlé, P&G…) que, a través de esta entidad pantalla, “limpian” su imagen pero sin cortar el ritmo de la producción, ni generar sistemas más limpios como el envase retornable y reutilizable. Ecoembes no es, por tanto, una organización medioambiental, como anuncian. Ni una entidad sin ánimo de lucro: en los últimos 18 años, han multiplicado por cinco sus ingresos que, solo en 2018, ascendían a 578 millones de euros.

“Ecoembes y sus empresas han bloqueado durante mucho tiempo alternativas a la de su ineficiente gestión de envases, como sería disponer de un sistema de retorno y devolución de envases. Dos décadas perdidas en la lucha contra la contaminación por plásticos”.

Greenpeace ha confirmado los graves fallos del sistema por el que la mayoría de los residuos acaban en vertederos, en incineradoras, exportados, quemados o, directamente, abandonados en el medioambiente.

VERTEDEROS. Según el MITECO, el 44% de los plásticos españoles acaban en vertederos, cuando la mayoría podrían ser reciclados.  Instalaciones no habilitadas para almacenar plástico en la que desde 2016, se acumula plástico de ocho empresas, seis de ellas homologadas y adjudicadas por Ecoembes. A pesar de que una sentencia obligaba en 2018 a la retirada inmediata del plástico, Greenpeace ha comprobado cómo el plástico, lejos de ser reciclado, se tapa con tierra.

INCENDIOS EN PLANTAS DE RECICLAJE. Desde 2012 a septiembre de 2020, se han contabilizado 342 incendios en plantas de reciclaje y, al menos, hasta 2019, 35 de ellas aparecen en los listados de recuperadores y recicladores homologados por Ecoembes. De estas 35 plantas, 26 han sufrido más de un incendio, y algunas hasta cinco, en este periodo, que han llevado al Seprona a hablar de un índice de intencionalidad de, al menos, un 15%, y a las compañías aseguradoras a endurecer las pólizas en el sector ante esta alta siniestralidad.

MEDIOAMBIENTE. La acumulación de plástico en nuestro medioambiente es evidente. Solo en mares y océanos, se calcula que cada año se concentran hasta 12 millones de toneladas de basura y entre un 21% y 54% de las partículas de microplásticos en el mundo están en la cuenca del Mediterráneo.

EXPORTACIÓN. La normativa laberíntica de exportación y la falta de controles permite que algunos exportadores envíen plásticos al exterior impunemente.

En Malasia, por ejemplo, Greenpeace ha encontrado, dos años seguidos, envases plásticos españoles en vertederos ilegales, como el de Jenjarom. El ministerio de Energía, Ciencia, Tecnología, Cambio Climático y Medioambiente malasio ha devuelto a España, en los dos últimos años, más de una veintena de contenedores de residuos plásticos que intentaban entrar al país ilegalmente. Se han encontrado indicios de exportación de plástico en otros países como Indonesia y Ghana.

INCINERADORAS. Es vergonzoso e inmoral que Ecoembes habla de economía circular para referirse al plástico que incinera ya que emite sustancias muy tóxicas como las dioxinas/furanos que causan cáncer o metales pesados como el mercurio, cadmio y plomo, así como los principales gases de efecto invernadero.

Además del evidente problema medioambiental, la mala gestión de Ecoembes está generando un sobrecoste tanto a las empresas productoras, ya que muchos de los envases por los que han pagado el punto verde no se reciclan. como a la ciudadanía por el hecho de que Ecoembes calcula, normalmente a la baja, lo que costará a los ayuntamientos la recogida de envases plásticos -del contenedor y de la calle-, generando sobrecostes a las administraciones (por ejemplo, más de 30 millones anuales en el Área Metropolitana de Barcelona). 

Las maquinas alemanas de reciclado de botellas


Es importante poner de manifiesto que tanto Las latas de refresco, que se suelen fabricar de acero cubierto de una capa fina de estaño por ambas caras, más conocida como hojalata, o de aluminio y el polietileno tereftalato (PET) es muy usado en la producción de envases o bebidas, como los refrescos y botellas de agua. Es un material de uso diario en el sector industrial, es reciclable 100% algo que en España no se hace en la actualidad.

Denominado Pfand ("contenedor" en alemán), sistema de recuperación de botellas que grava con una pequeña cantidad de dinero todas las ventas de bebidas envasadas también llamado sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR). Un dinero que puede ser recuperado posteriormente cuando el consumidor devuelve el envase en los comercios de alimentación o en máquinas instaladas en la calle y que están diseñadas para recoger y compactar esas botellas.

Este tipo de recuperación ya se ha puesto en marcha no solo en Alemania con un porcentaje de recuperación del 98,5%. También en Dinamarca con un 99,5%, o Noruega y Países Bajos con un 98% de reciclaje. Índices de recuperación sobresalientes que llaman a la reflexión.

Este sistema llamado también Reverse Vending se está experimentando en algunas Comunidades Autónomas de España encuentra una gran resistencia por parte de Ecoembes y la gratificación por reciclar a la ciudadanía es extremadamente pobre a diferencia de en Alemania. En los presupuestos participativos se presentó "esta iniciativa" para poner en marcha dicho "sistema" y la excusa municipal siempre fue que del reciclaje ya se “encargaba” Ecoembes. A finales de pasado año el Gobierno aprobó el Real Decreto de Envases y Residuos de Envases para avanzar enla implantación de la economía circular 

En definitiva que Ecoembes tenga la patente por así decirlo del reciclaje en España es un retroceso enorme en cuanto al desarrollo e implantación de la economía circular

Demandas de Greenpeace

- Que el dinero recaudado por el punto verde sea gestionado por las administraciones locales que son las que recogen y transportan los envases y no por Ecoembes. 

- Una legislación que fomente la reutilización y un sistema de gestión de residuos integral.

- Que se fomenten medidas para la reducción del plástico de un solo uso.

- Y principalmente que las/los consumidores reduzcan en lo posible su consumo de plástico de un solo uso y separando residuos hasta que tengamos un sistema eficaz de gestión.

https://es.greenpeace.org/es/en-profundidad/ecoembes-lo-reyes-del-greenwashing/

Poner aquí informe “Ecoembes miente”

Fuente Greenpeace





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